Por datos recogidos por tradición oral, sabemos que el primer carnaval que se efectúo en Guamúchil fue en 1920. Las fiestas presididas por su graciosa majestad María Díaz Angulo, llevando como princesas a María Rubén Castro y a Tena Sánchez. El rey fue Bernardo Sánchez. A este primer Carnaval, de lo que podríamos llamar la primera etapa, le sucedieron muchos mas, a los que acudían habitantes de todos los pueblos aledaños a disfrutar de la alegría que producen los festejos del Rey Momo.

Después de un receso prolongado se reanudaron las fiestas en su segunda etapa. Sin perder la tradición secular, el nuevo carnaval de Guamúchil está investido de un sentido social, pues las utilidades cuando las hay, son aplicadas en la realización de obras de beneficio común, que contribuyen en el bienestar del pueblo. En este aspecto es único, pues no se tienen noticias de otros similares en el resto del país.

Cuando José Betancourt Gómez, socio del Club El Costal, propuso a sus compañeros organizar las fiestas, la idea fue aceptada y aprobada con tanto entusiasmo, que de la reunión semanal que se llevaba a cabo, salió una comisión a plantearle el proyecto al doctor Florentino Camacho Rivera, quien ejercía su segundo año de gobierno como presidente municipal. El primer Edil, contagiado por el entusiasmo de los "costalinos", autorizo la realización de los festejos, y ofreció todo el apoyo de parte del ayuntamiento para llevar a feliz termino el evento.

De la reunión con el presidente municipal salieron con el proyecto y los propósitos definidos; se llevaría a cabo un carnaval, con una intención benéfica para el pueblo, tanto en lo material como en lo cultural; las utilidades se aplicarían en la construcción de un parque infantil; se establecería el evento de los Juegos Florales, convocándose a un concurso de poesía dentro del marco de la fiesta del Gay Saber, y la administración estaría a cargo de un comité, mismo que aplicaría las utilidades en la obra acordada, al que se denomino Comité Central de Carnaval.

El Carnaval de Guamúchil nació en 1973; desde que llego se convirtió en la fiesta más popular no solo de la ciudad sino de toda la región, desplazando a la tradicional feria Guadalupana. Mientras que la festividad decembrina desapareció, la de carnestolendas año tras año alcanza mayor relevancia y nombradía a tal grado , que al carnaval guamuchilense se le cataloga como el segundo de importancia a nivel en el estado.

En el primer año, el Club Costal se dividió en dos plantillas y contendieron internamente por el reinado. Posteriormente se sumo la valiosa participación de todos los clubes deportivos y de servicio social, con cuya colaboración han hecho posible que Guamúchil tenga todos los años.

Desde su nacimiento, con un razonable tiempo de anticipación empiezan los preparativos. Previa cita de las autoridades municipales, se reúnen los clubes y el patronato; se discuten propósitos y condiciones; se integran planillas, se nombran candidatas e inicia la contienda. Un patronato conformado por probos ciudadanos, se encarga de la organización, dirección, y de llevar a feliz termino las fiestas.

Anualmente las autoridades municipales otorgan una medalla de oro tanto a la reina del Carnaval como a la de los Juegos Florales. Las preseas son impuestas en un acto publico, donde también se da lectura al decreto municipal que las declara hijas predilectas del municipio. Por parte del patronato se entregan reconocimientos a todas las personas e instituciones que participan en el desarrollo de todos los actos.

El evento se desarrolla en un ambiente de sana diversión popular y con un gran contenido socio -cultural. El encauzamiento de la fiesta por senderos de expresión e intercomunicación amistosa con otros pueblos, se manifiesta con la presencia de bellas embajadoras y los miles de visitantes de todos los rincones del Estado. Los aspectos culturales son avalados con la participación de grandes señores de las distintas disciplinas humanísticas, resumiendo en el certamen de los juegos florales a connotados valores, amantes de la Gaya Ciencia. Los miembros de la Academia de la cultura Sinaloense "Alejandro Hernández Tyler", A. C., delegación Guamúchil, se responsabilizan de la organización de los juegos florales todos los años.

La calidad y el éxito de todos los actos esta garantizada con la participación de reconocidas instituciones como DIFOCUR, Universidad Autónoma de Sinaloa Universidad de Occidente y otros centros educativos y culturales, tanto del solar Sinaloense como de las mas allá de sus fronteras. El acercamiento artístico de los mejores exponentes del Folklore nacional que tanto gusta a nuestra gente, así como la presentación de cuadros de distintas disciplinas culturales, se hace llegar al pueblo gratuitamente, con presentaciones populares, que se verifican sobre un templete que se ubica en el cruce de las calles Rosales y Escobedo.

El carnaval Infantil es organizado por el DIF Municipal, y participan en el todos los jardines de niños. Este se lleva a cabo el día Lunes. El pequeño carnaval también se ha ganado la simpatía del pueblo. Aplaudido y aceptado por los padres de familia, es una fiesta blanca alegre y vistosa, pero además... Goza del agrado de todos los niños.

Los aspectos culturales son avalados con la participación de grandes señores de las distintas disciplinas humanísticas. El certamen de los juego florales ha contado con distinguidas personalidades amantes de la Gaya Ciencia, como al profesor Alejandro Avilés, Hector R. Olea, Francisco Gil Leyva, Enrique Peña Gutiérrez, Juan Macedo López y Roberto Hernández Rodriguez, entre otros, reconocidos poetas como Solón Zabre, Rosa María Peraza, Guillermo Llanos, Ulises Cisneros, Jesús Oviedo, Rafaela Lucrecia Esquerra, etc., Se han hecho acreedores del premio de poesía.

En los primeros años antes de la crisis, los desfiles de carros alegóricos tuvieron el atractivo de la participación de una Banda de Música y grupo de bastoneras de Chulavista, Cal., y bellas embajadoras de la ciudad de Los Angeles, entre las que figuraron Denisse Adams, Julia Wade, Kim Homas, Lynn Marye Hamilton, Tawinda Richardson, Rachel Clurcotte, Chris Gattuso y Sherre Richardson. En el aspecto musical, Pablo Beltrán Ruiz, Chucho Pimentel, Leo Acosta, Sonora Casino y otros, cada quien en su tiempo, le dieron realce a las fiestas. El elenco artístico siempre ha sido de primera línea: Sasha Montenegro, Imelda Miller, Thelma Tixou, Diana Torres, Rosa Gloria Chagoyán, Sergio Esquivel, Carlos Lico, Pepe Jara. Jorge Muñiz, Joshio y Beto el Boticario, solo son algunos de los que han actuado para el público asistente.

La primera obra entregada al pueblo con las utilidades del Carnaval, fue el Parque Infantil; después vinieron el Estadio de Béisbol, la Alberca, la Casa de la Cultura, el Centro de Convenciones, y el Jardín de la entrada norte de la ciudad.

Desde su nacimiento, dos planillas integradas por varios clubes son las que han dado vida a las fiestas. El club El Costal siempre ha sido líder de la planilla verde; El Club de Leones, de la roja. Eduardo Rodriguez Villaverde, Ismael Obeso Angulo, Arturo López Rochín, Arturo Avendaño Gutiérrez, José Hugo Villaverde, Samuel Hall Sievers, Salvador Velázquez Iribe, Harry Arthur Patterson Martínez, Ciriaco Vargas Bojorquez y Enrique Romero Gravos, se han desempeñado como presidentes del patronato en lo que lleva de vida el tradicional evento.

Sin menospreciar el trabajo que han realizado cada una de las personas integrantes del Ptronato, merecen mención especial: Célida Vidales, Blanca Belmontes, Bertha Oralia de la Rocha, Silvina Montoya Santos, Natalia Argelia Gaxiola y Doña Chila, además Manuel Barrancas, Pablo Bojorquez, Alejandro Jimenez, Fausto Polledo, Abel López, José Takashima, Jaime camacho y el "Tomate" Camacho. En el mismo caso están: Luis Montoya, Cristobal T. Castro, Francisco García Romero, Raúl Aguilar, Jorge AdalbertoVarela y Cipriano León. Independientemente del Patronato, los Clubes de servicio y algunas instituciones, la participación entusiasta de los doctores Gómez Juárez, Sergio Díaz López y los Hermanos Pérez Sánchez, ha sido determinante para dar mayor lucidez a los desfiles de los carros alegóricos.

Así nació el Carnaval de Guamúchil; de una inquietud de los socios del desaparecido Club El Costal, hecha realidad y buenos propósitos; con esa finalidad vive todavía, pero además con el ánimo de darle al pueblo las utilidades cuando las hay, en una obra de beneficio común.